Si algo distingue a los centros La Salle es su capacidad y su labor de formación continua. Las sociedades avanzan, los jóvenes cambian y la escuela debe de ser un espacio donde acoger la novedad de cada tiempo. Este ha sido el cometido que ha reunido, el pasado sábado 16 de marzo, a unos cien profesores de primer, segundo y tercer año (procedentes de las obras educativas y socioeducativas de la zona noroeste de España) en la Residencia de Arcas Reales de Valladolid.