El Foro (de formación) interzonal celebrado en Córdoba los días 9 y 10 de febrero ha supuesto la reactivación de la relación entre Hermanos y Asociados de las zonas comunitarias de Madrid Centro, Madrid Provincias, Andalucía Oriental y Andalucía Occidental. Este encuentro “nos ha tocado el corazón” haciéndonos valorar la lectura carismática de las Meditaciones de los domingos y fiestas del año de nuestro Santo Fundador.

El Hermano Antonio Botana nos ayudó a redescubrir el itinerario de La Salle, focalizando su exposición en las claves para una lectura de nuestra vida a la luz de los mensajes de las Meditaciones. Nos invitó a percibir como eje central el proceso de identificación que hemos de tener con Cristo. Y nos ha hecho comprender el valor de la comunidad ministerial como el nudo de conexión e hilo conductor de la inspiración de las Meditaciones y de nuestra experiencia carismática.

Nos motivó haciéndonos ver que de modo realista somos "mediadores" capaces de poder leer nuestra propia historia de salvación, que poseemos la habilidad para comprender la Palabra de Dios, que seguimos invitados a relacionarnos con Cristo, que nuestra misión es construir fraternidad, que tenemos la virtud de vivir con gozo como miembros de una comunidad ministerial y que podemos contagiar siendo humildes y pobres.

¡Bonitas pautas para vivir nuestro paradigma carismático!

Hermano Luis Octavio Solano, Animador de zona

El Foro (de formación) interzonal celebrado en Córdoba los días 9 y 10 de febrero ha supuesto la reactivación de la relación entre Hermanos y Asociados de las zonas comunitarias de Madrid Centro, Madrid Provincias, Andalucía Oriental y Andalucía Occidental. Este encuentro “nos ha tocado el corazón” haciéndonos valorar la lectura carismática de las Meditaciones de los domingos y fiestas del año de nuestro Santo Fundador.

El Hermano Antonio Botana nos ayudó a redescubrir el itinerario de La Salle, focalizando su exposición en las claves para una lectura de nuestra vida a la luz de los mensajes de las Meditaciones. Nos invitó a percibir como eje central el proceso de identificación que hemos de tener con Cristo. Y nos ha hecho comprender el valor de la comunidad ministerial como el nudo de conexión e hilo conductor de la inspiración de las Meditaciones y de nuestra experiencia carismática.

Nos motivó haciéndonos ver que de modo realista somos "mediadores" capaces de poder leer nuestra propia historia de salvación, que poseemos la habilidad para comprender la Palabra de Dios, que seguimos invitados a relacionarnos con Cristo, que nuestra misión es construir fraternidad, que tenemos la virtud de vivir con gozo como miembros de una comunidad ministerial y que podemos contagiar siendo humildes y pobres.

¡Bonitas pautas para vivir nuestro paradigma carismático!

Hermano Luis Octavio Solano, Animador de zona