El pasado 20 de agosto, el monasterio de Santa María de Bujedo acogió el encuentro de más de 150 asistentes de las zonas comunitarias de la zona noroeste en un ambiente festivo que marca el inicio del nuevo curso, ya a la vuelta de la esquina.

Para un lasaliano de cuna, volver a Bujedo es regresar a casa. Un hogar que tanta vida emana en el paso de los campamentos de verano, formaciones, aulas activas… y que en esta ocasión ha recogido el contexto perfecto para la celebración del día de las zonas comunitarias. En definitiva, un día muy necesario para recuperar la presencialidad después de dos cursos marcados por las restricciones.

Los actos previstos, coordinados por el Hermano Esteban de Vega -visitador auxiliar de la zona noroeste- y presididos por el Hermano José Román Pérez -visitador del Distrito Arlep- dieron paso a la exposición de la memoria anual del curso pasado por parte de los directores de zona y la presentación de las diferentes realidades vinculadas al marco pedagógico (implantación y desarrollo del Nuevo Contexto de Aprendizaje), pastoral (evaluación de los encuentros de verano) y formación e identidad (evaluación de la implicación y la pertenencia de los profesores de formación inicial). En esta última delegación, se hizo oficial el cambio de titular, siendo Noelia Redondo la persona que sustituirá al Hermano José Antonio Ramos al frente del ámbito formativo.

Tras el cierre de la asamblea, la mesa de la celebración tuvo como protagonista a Paula Lopes, de Barcelos (Portugal), por la renovación permanente de su compromiso como asociada al Instituto; al mismo tiempo, Joana, Nandinha, Álvaro, María Jesús, Daniel, Suso y los Hermanos Joel y Filipe proclamaron la renovación temporal de su compromiso como asociados y hermanos respectivamente. Una fiesta que tuvo como culmen la mesa compartida y el regalo de la fraternidad.