El mes de mayo es siempre época de celebración en nuestro colegio de La Salle Alaior, lo dedicamos al Homenaje a la Vejez, la exposición de flores, la cena de finalistas, la fiesta escolar, celebramos los “Jocs d’Antany” y vivimos con ilusión todas nuestras tradiciones.

En este curso, las circunstancias hacen que no podamos celebrar estos acontecimientos como es habitual pero hemos creído importante recordar una efeméride especial. El 17 de mayo de 1980, hace ahora 40 años, la comunidad educativa de Alaior inauguró, gracias al esfuerzo de los que formaban el Patronato y la Asociación de Padres y Madres el edificio que ocupamos.

Nuestro centro ha tenido, en sus más de 110 años de historia en Alaior, varias localizaciones. En concreto, justo antes estábamos en el edificio de “La Salle Petita”, donde actualmente se ubica la comisaría de la policía local de Alaior.

Hace ahora cuatro décadas, la asociación de padres y madres dio muestra de su ilusión y empeño al conseguir el aval económico suficiente para emprender la construcción del actual edificio. Y eso se consiguió con el apoyo de todos, como una apuesta clara de futuro, de creer en nuestro proyecto educativo y en su continuidad.

Formando una verdadera comunidad educativa, familias, hermanos y profesorado trabajaron juntos para poder inaugurar un nuevo edificio que permitiera adaptar el centro a los nuevos tiempos, ganando espacio y versatilidad.

Siguiendo la estela de estas juntas tan valientes e ilusionadas, el edificio ha sufrido en estos 40 años dos ampliaciones importantes más. Allá por el año 1995 se construyó el polivalente y los vestuarios y en el 2003 se emprendió la ampliación de la nueva parte de secundaria.

Queremos agradecer desde este espacio el esfuerzo y dedicación de todas aquellas personas que han contribuido a lo largo de este tiempo a consolidar un proyecto educativo de presente y con futuro para Alaior, el proyecto de La Salle Alaior.

Solo con trabajo en equipo y con compromiso se pueden conseguir grandes cosas, por eso, actualmente nuestro proyecto educativo lleva por lema: “Juntos es más fácil”. Sin duda, sin los hermanos de La Salle, sin  los padres y madres, sin los alumnos, sin el profesorado y sin todos los colaboradores que hemos tenido, esto no sería una realidad.

Incluso desde casa hemos disfrutado de paellas y chocolatadas virtuales que han llenado nuestros hogares de sabor y de buenos recuerdos. A pesar del ambiente festivo más de una lágrima ha caído al ver todos los vídeos que se han realizado y que tantos y tantos recuerdos han traído a nuestro corazón. Las redes sociales también han sido testigos de nuestra alegría y nuestro sentido de pertencencia, cientos y cientos de fotos han sido compartidas con muchos hastags lasalianaos, que aunque no hayan sido tendencia mundial, nos han unido a lasalianos de todos los rincones del mundo.

Unas fiestas de La Salle muy especiales, para una situación especial. Ojalá estas celebraciones nos ayuden a mantener la esperanza, a saber que como lasalianos no estamos solos, que formamos una gran familia en la que vivimos la fe, la fraternidad y el servido. Una familia que se siente orgullosa de su historia y que no deja de transformar el presente soñando un mundo mejor. Aunque de vez en cuando un pequeño virus quiera quebrar nuestros sueños, en San Juan Bautista de La Salle, nuestro fundados y patrón,  descubrimos el ejemplo a seguir, de aquel que no se rinde ante las dificultades.

Comunicación Sector Valencia-Palma