La propuesta del módulo de esta décima semana nos planteó un gran desafío, principalmente sobre las meditaciones para el tiempo de retiro que escribió nuestro Fundador en su tiempo y la relación que podían tener con nuestra tarea de educadores en la actualidad.

El módulo fue presentado por Juan García Callejas, quién nos invitó en todo momento a tomar estos días para la reflexión, la meditación personal y poder encontrarle un nuevo sentido a las meditaciones que varios de nosotros conocíamos desde hace tiempo.

Realmente, fue una propuesta que nos movilizó muchísimo, nos hizo situarnos en los días y las necesidades de La Salle en aquel tiempo, pero actualizando en nosotros el futuro de nuestras obras y distritos.

Tuvimos la fortuna de compartir con la comunidad de la residencia de Hermanos mayores una eucaristía en recuerdo de los “Hermanos Mártires del Sigo XX”, entre los que se encuentran varios que vivían en Griñón y conocer su historia de valentía y entrega absoluta a la llamada de Dios; siendo ejemplo para todos los que creemos que la educación y el evangelio son las posibilidades del cambio de esta sociedad tantas veces individualista y unitaria.

Pudimos recorrer el museo de la casa de Griñón, relatado por el Hermano Celestino, quién nos contó cómo se fue construyendo poco a poco la casa, la escuela, la capilla y todas las instalaciones que allí pudimos apreciar.

También tuvimos la posibilidad de recorrer las nuevas y hermosas instalaciones de la obra educativa, conociendo sobre todo su gran propuesta de aprendizaje cooperativo, y entendiendo los roles que desempeñan alumnos y directivos en esta novedosa manera de enseñanza que nos maravilló con la dinámica y equipamiento de sus clases para llevar adelante el proyecto.

Visitamos también la residencia de los Hermanos mayores, con quienes pudimos hablar y escuchar sus experiencias y camino recorrido. Compartimos un café junto a ellos y pasamos un momento muy agradable. 

Mientras continuábamos el trabajo con las meditaciones, nos tomamos el tiempo para compartir y celebrar el cumpleaños del Hermano César Ruiz, que nos encontró muy alegres acompañándolo en el festejo compartido.

Recordamos mucho al Hermano Angel Terceño, que tuvo que ser hospitalizado, pero que ya se encuentra bien y recuperándose y a quién esperamos en la comunidad con mucho entusiasmo.

Quisiéramos destacar la importancia y dedicación en las oraciones compartidas, pensadas por Juan, que nos invitaban a pensar, reflexionar y compartir desde un clima cálido, contemplativo y de escucha que hemos disfrutado muchísimo.

Por las noches surgían grandes desafíos de parchís y de cartas, en los cuales hay un equipo ganador que no puede ser vencido y disfruta de sus logros, con los cuales nos divertimos y distendemos mucho creando un lindo clima comunitario.

Tener la posibilidad de pensar, reflexionar, conocer y llevar a la vida cotidiana las meditaciones para el tiempo de retiro del Fundador, nos invitó a cuestionar nuestro trabajo y a pensar con entusiasmo los desafíos que se aproximan, pero siempre teniendo como referente y maestro a Juan Bautista de La Salle.

El  jueves, compartimos juntos una película que nos ayudó a pensar en la importancia y el valor de los educadores, como también de las familias que se van constituyendo. La película “Hoy empieza todo” nos contextualizó muy bien en la realidad que a muchas de nuestras escuelas les toca atravesar. Valoramos y rescatamos cuestiones que tienen que ver con la vida del Fundador, rescatamos el cuidado del Director a los maestros, la entrega personal para que muchos niños puedan estar mejor, la intención firme de no dejar a nadie fuera de las escuela, no importa cuál fuere el motivo.

El director del CEL, el Hermano José Ángel, dedicó un tiempo personal a cada uno, para compartir nuestros sentimientos y cómo estamos llevando adelante esta experiencia. Realmente valoramos su dedicación y cuidado hacia nosotros.

Sinceramente, hemos pasado una semana para pensar en nosotros mismos, desde los textos propuestos para trabajar por Juan, hasta las oraciones y caminatas que hemos compartido en comunidad, valorando fundamentalmente la capacidad para que podamos discernir, repensar y discutir sobre la influencia de lo trabajado en nuestra tarea de hoy con los alumnos y alumnas, que son quienes fundamentalmente nos movilizan a pensar en ellos, en sus intereses y en el futuro del Instituto.