24ª promoción del CELAS Educadores
¡Alegría!, así es como han celebrado el reencuentro los participantes de la 24ª promoción CELAS de educadores. El jueves, 14 de enero, daba comienzo el 6º encuentro con la cena compartida y la “puesta al día” de sus vidas. Tras la misma, momento de reunión para conocer el horario y la temática: “La identidad de la escuela lasaliana. La opción por los pobres”, así como la información sobre la semana de Santiago, que marcará el final de su formación.
Los participantes del sector de Valladolid se quedaban un rato más en la capilla para preparar la oración del día siguiente, pues eran los responsables de animarla. Y con ella comenzamos la mañana del viernes. Con la lectura del Deuteronomio nos recordaban que “Nunca dejará de haber necesitados en la tierra, y por eso yo te mando que seas generoso con aquellos compatriotas tuyos que sufran pobreza y miseria en tu país”.
El Hno. José Miguel Jiménez iniciaba su presentación cuestionándonos: ¿Es posible la justicia sin misericordia? ¿Hay justicia sin misericordia? A través de diversos textos de la Palabra, concluyó que la misericordia es justa y necesaria, así como la justicia es misericordiosa y necesaria. A continuación compartía con el grupo la preferencia que en nuestras escuelas debe haber hacia los pobres, siendo esta preferencia una opción desde los orígenes. En la última parte de su sesión presentó el plan de educación en la justicia y la solidaridad.
Con la información recogida durante la mañana y desde la realidad que cada uno vive en su obra educativa o socioeducativa, los participantes trabajaron, durante la tarde, cómo es el servicio que prestan a los más necesitados. Y todo ello en tres momentos: reflexión personal, momento de compartir en grupos pequeños y puesta en común en grupo grande.
Y para finalizar las sesiones del viernes, pudimos escuchar la interesante y emotiva experiencia de Mateo Ruiz, participante del sector de Valladolid, que en 2013 estuvo de voluntario en un proyecto de verano en Burkina Faso. ¡Gracias, Mateo!
En la capilla se quedaban un rato, a preparar la oración del día siguiente, los participantes del sector de Valencia-Palma (zona peninsular). En la misma nos recordaban que “Quienes enseñen a muchos la justicia brillarán como estrellas por toda la eternidad”. (Daniel 12, 3. San Juan Bautista de La Salle, Meditación 208, 2)
Tras la cena del viernes, los participantes de Paterna, Alcoy y Alcora se pusieron “manos a la obra” y nos hicieron agua de valencia. Buen trabajo en equipo y deliciosa bebida cuyo ingrediente principal es la naranja. En momentos de mesa compartida también hemos podido degustar otros excelentes productos de estas localidades.
En la mañana del sábado, el acento ha estado en las ONGD´s lasalianas y los países empobrecidos, en las obras de nuestro Distrito ARLEP. El Hno. Felipe García animó muy bien el tema, de manera muy cercana y sencilla, estableciendo, al final del mismo, un rico diálogo con los participantes.
Y el encuentro termina con la satisfacción general de todas las personas que lo hemos hecho posible. Ganas de contagiar y algunas preguntas en la mochila: ¿Qué podemos hacer, desde nuestra realidad, por los más vulnerables?, ¿Hacemos visible a Dios con nuestras actitudes? Y recordar siempre que con amor al prójimo y la misericordia, podemos transformar el mundo.
Lidia Rey Lillo
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Creado: 18 Enero 2016
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Última actualización: 18 Enero 2016
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