Imprimir

Escolásticos 2En diciembre nos encontramos en Madrid. Ahora tocaba Valladolid, en concreto, en el barrio Girón. Allí nos encontramos a las 21:00 del día 9 de marzo. Los 3 Hermanos escolásticos de Madrid, junto con su acompañante, el Hermano Jon, llegaron puntualísimos para comenzar el encuentro con una cena fraterna. Entre pescado y sopa (cómo manda la santa abstinencia), nos relatamos lo que últimamente habíamos vivido, de manera informal. Después de la cena, momento distendido: una película para relajarnos y pasarlo bien.

El sábado estuvo marcado por muchos momentos donde la vida de cada uno se compartía a flor de piel. Empezamos la mañana rezando con los Hermanos del Sindicato Calvorota, que se reunieron ese día en Girón. Después de la oración, los Hermanos sindicalistas se dedicaron a sus cuestiones laborales y vitales, y los escolásticos a compartir desde otra perspectiva vital.

EscolásticosNos dieron un documento, algo que sirviera como “pórtico” de una catedral, donde lo más importante era entrar para contar lo vivido dentro: anhelos, crisis, mediaciones para el encuentro con Jesús, inquietudes, experiencias significativas, etc. Es decir, releer la propia historia a la luz de la comunidad y de la fe. Así pasamos la mañana.

Nos volvimos a juntar con los Hermanos sindicalistas para compartir la comida. En un ambiente fraterno y cálido disfrutamos de las natas y el porto, traídos por los hermanos portugueses.

Por la tarde, nos fuimos al museo de Escultura, donde nos esperaba Nacho de la Calle, para contarnos algunas cosas interesantes sobre dicho museo. Fue una visita interesante, donde pudimos enriquecernos con la cultura y las enseñanzas de Nacho. La tarde no estaba completa, porque nos faltaba el broche de oro: conocer la comunidad de acogida, en el colegio La Salle. Después del museo y de un chocolate caliente, nos dirigimos al colegio, porque allí nos esperaban algunos Hermanos y asociados para contarnos su proceso, vivencia y compromiso lasalianos. Fue una bonita reunión donde pudimos preguntarnos, aconsejarnos y escucharnos. Después de una pequeña oración, compartimos la mesa de la cena comunitaria. En familia hemos terminado el sábado.

Escolásticos 3El domingo comenzó con la oración a las 8:30, a la que se siguió el desayuno y un paseo por el cerro. Fue un momento para compartir más informalmente y ver la ciudad de Valladolid desde arriba. A las 11:20 nos fuimos a Arcas Reales, porque nos esperaban los Hermanos de la residencia. Estuvimos compartiendo con ellos la eucaristía, presidida por José Luis, y la comida. Fue un momento de encuentro de Hermanos de distintas edades y recorridos, pero un mismo suelo común: ser Hermano. Allí nos saludamos, abrazamos y compartimos. Fue una jornada bonita de encuentro y convivencia.

Después de comer tuvimos un pequeño momento para revisar cómo habíamos vivido los dos encuentros y, quizá, apuntalar algunas ideas de futuro. Fue una reunión rica, donde cada uno pudo expresar cómo se sentía y cómo ve el proceso formativo.

A las 16:30 era hora de despedidas. Entre abrazos y «ánimos» deseamos lo mejor para cada uno. Era hora de emprender el viaje a casa, con la certeza de que había valido la pena haberse encontrado para hacer camino juntos.

¡Que San Juan Bautista de La Salle nos acompañe en el seguimiento de Jesús! ¡Por siempre!

Hno. Joel Figueiras